¿Qué hacer cuando te ponen a tu hijo en contra?
¿Qué puedo hacer?
En este caso no sólo tenemos a un hijo que no quiere relacionarse y rechaza a su padre o madre, además existe la circunstancia añadida de que el origen o uno de las causas del origen de dicha situación es que nos han puesto a nuestro hijo en contra.
Normalmente cuando ocurre esto, quien está poniendo en contra a nuestro hijo es el otro progenitor o progenitora o sus seres queridos o allegados.
Una cosa es que el niño fruto de su evolución y falta de madurez pueda tener mejores o peores momentos en la relación con su madre o padre pero que se ponga al niño en contra es lo más cruel que puede existir en el seno de una familia.
Mi ex ha puesto a mi hijo en mi contra:
Si su expareja y padre o madre del hijo común ha influenciado al niño hasta el punto de ponerle en su contra nos enfrentaremos a una situación muy compleja. Por encima de todo, debemos de mantener la calma y el respeto, pues no por el hecho de que nuestra expareja malmata y arremeta contra nosotros por medio de nuestro hijo nosotros tenemos que hacer lo mismo o protagonizar situaciones similares.
¿Qué podemos hacer cunado han puesto a nuestro hijo en contra?
No someter a la relación a más presión de la que puede soportar. Gráficamente no estirar de la cuerda que está tensando nuestra expareja pues en medio está nuestro hijo y no debemos de dañarlo. El hecho de que no estiremos de la cuerda no quiere decir que soltemos la cuerda, eso nunca se debe de hacer pues en definitiva los niños alienados no tienen la intención de enfrentarse a nosotros sino que son víctimas de dicha influencias y debemos de apoyarles y no desvincularnos ni desentendernos de ellos.
Cómo recuperar a un hijo alienado
Recuperar a un niño alienado o influenciado no es sencillo, pues precisamente no tenemos un apoyo en el otro progenitor sino que es el causante de la negativa percepción que tiene de nosotros nuestro hijo.
Cualquier dificultad evolutiva de un niño es superable o cuanto menos mejorable con dedicación por parte de ambos progenitores, pero cuando los esfuerzos y refuerzos de uno de los progenitores son anulados por parte del otro, poco se puede hacer a corto plazo.
No se puede pretender que un niño alienado por su madre o padre entienda una conversación de adultos en la que se le explique que lo que dice el otro progenitor no es verdad, ese no es el camino pues confundiremos a nuestro hijo que no suele tener la madurez suficiente como para separar las dos versiones tan dispares de sus padres y no mezclarlas.
Hay que demostrar con hechos que queremos y apoyamos a nuestro hijo y darles tiempo en la vida real, mientras que paralelo tratar de conseguir refuerzo de psicólogos de familia e incluso plantearse si es conveniente plantear un proceso judicial que detecte dicha alienación y pueda contrarrestarla a tiempo de perder por completo la relación con nuestros hijos.
No quiero saber nada de mi madre o mi padre:
Desde el punto de vista del hijo también debemos de ponernos en su lugar y analizar cómo se puede sentir un hijo después de haberse criado con una familia y acabar rechazándola con frases como «no quiero saber nada de mi madreo mi padre«.
Si estás distanciado de tu hijo adulto, si tu hijo te ha apartado de su vida -ya sea por mucho o poco tiempo-, es una experiencia desgarradora. Cuando tu hijo te aparta de su vida, te provoca profundos sentimientos de vergüenza, culpa, desconcierto y dolor, que pueden convertirse fácilmente en ira. Además, puede despertar las peores sospechas de la gente y hacer que te sientas juzgado, incluso por amigos y familiares.
A veces, por supuesto, hay circunstancias en las que cortar con uno de los padres es la única opción viable para un hijo adulto (mayor de 18 años), por ejemplo, en caso de abuso físico, emocional o sexual pasado o presente por parte de uno de los padres.
Aunque es habitual achacar el motivo del distanciamiento a todo tipo de cosas, desde problemas de dinero hasta conflictos de personalidad, pasando por el divorcio o una dinámica familiar difícil, muchas veces, sin embargo, los padres distanciados se quedan a oscuras tratando de averiguar qué ha fallado.
Las relaciones familiares tienen que tender al amor, el cariño y el respeto y cuando hay desajustes todos los miembros los pasan mal y por ello es tan importante la mediación y acuerdos libres y conscientes.
¿Cómo recuperar mis hijos después del divorcio?
¿Qué hacer cuando te ponen a tu hijo en contra?
Ambas preguntas pueden tener la misma argumentación y respuesta.
Un divorcio con hijos puede ser muy complicado pero si estás a tiempo busca los profesionales que te ayuden a enfocar de la manera más beneficiosa para los niños el proceso de manera que se produzca el mínimo enfrentamiento y desgaste entre ambos progenitores que permitan un relación parental mínimamente cordial.
Luchar por él con respeto y dándole un buen ejemplo con independencia de la inadecuada actuación que pueda estar realizando su madre o padre como campaña de desprestigio y enfrentamiento parental.
¿Cómo recuperar la buena relación con los hijos después de la separación o el divorcio?
- No alejándose de ellos aunque sea doloroso ver como nos rechazan.
- No pretender soluciones inmediatas, es un proceso constante fruto del esfuerzo del día a día.
- Ponderar las circunstancias y estar dispuestos de ceder en cosas que no tengan importancia a cambio de otras que sí tengan importancia, nuestro hijo, en la relación con la madre o padre del hijo común.
- Utilizar los medios que sean necesarios, personales, familiares y profesionales.