Diferencia entre separado legalmente y divorciado
La diferencia práctica de la separación y el divorcio es que una persona separada legalmente no podrá volver a contraer matrimonio hasta que el que mantiene se disuelva, mientras que la persona divorciada al haber disuelto el vínculo matrimonial podrá volver a casarse.
La diferencia entre el proceso de separación, desde el año 2005 en España que se permitió acudir directamente al proceso de divorcio sin necesidad de pasar por uno previo de separación, es el mismo. El precio, pasos, tiempo y trámites del proceso de separación y divorcio serán los mismos.
Lo que cambiará será el efecto y situación jurídica que tiene el hecho de que una persona se separe o se divorcie.
La separación suspende el vínculo matrimonial, pero sigue existiendo a pesar de ello, para decirlo de una manera coloquial y entendible, el matrimonio está suspendido, bloqueado, congelado, dijéramos que es la suspensión de la vigencia del vínculo matrimonial, pero el matrimonio no se ha disuelto, no ha finalizado, pues finalizaría únicamente en el caso de declaración de nulidad matrimonial, divorcio o fallecimiento de alguno de los esposos.
En lo que se refiere al proceso de divorcio, supone la terminación y disolución del vínculo matrimonial. El matrimonio acaba y por tanto, a diferencia de lo que hemos indicado en los casos de separación, el divorciado o divorciada sí que se podrá volver a casar con la misma u otra persona, siempre y cuando ambos en el momento de contraer matrimonio reúnan los requisitos legales establecidos al efecto, entre otros, no estar unidos a ningún matrimonio ni tampoco estar separado de hecho o legalmente.
Si tiene dudas en cuanto a la diferencia entre la separación legal o de hecho y el divorcio, puede consultar a nuestros abogados pues las consultas son gratuitas en nuestro bufete.