Cuando tu pareja te echa en cara todo pueden existir tres opciones, que tenga razón, que sea demasiado intransigente o que sea mutuo manteniendo una relación tóxica.
- Debemos de ser generosos y plantearnos en primer término si tal vez en todo o en parte tenga razón y que lo que nosotros percibamos como que nos echan en cara ciertas cosas, tenga su razón de ser y con independencia de que la forma pueda ser la más adecuada, o no, tiene sentido.
- En segundo lugar debemos de analizar si la parte contraria esta exagerando las cosas y se fija sólo en las cosas malas y parece que no pasa nada bueno o al menos no valora aquello bueno que pasa.
- La tercera de las opciones es que ambos tengan una relación tóxica con enfrentamientos mutuos por mantener una relación sufrida e inconciliable por parte de ambos.

Cuando tu pareja te echa en cara todo constantemente sobre todo se crea tensión y una situación incómoda. Las relaciones sentimentales no son forzosas, por tanto cada uno decide su propio comportamiento y lo que quiere o acepta de los demás.
Para nosotros, si en una pareja constantemente existen ataques y se pierden las formas, lo que debemos de hacer, siempre y cuando sea posible, es fomentar la capacidad de entendimiento. Hablar las cosas, no llegar a un enfrentamiento. En ocasiones se forma la denominada «bola de nieve» en la que de una pequeña diferencia se acaba engrosando un gran conflicto difícil de parar y gestionar.
Si es necesario buscar ayuda, deberá de hacerlo a tiempo, si por desgracia la relación debe de terminar, lo mejor es que termine a tiempo y de la manera más saludable posible, pues con el enfrentamiento nadie gana y como se suele decir, dos no discuten si uno no quiere.
No permita los reproches en una relación sentimental pues puede dejar de ser una relación de amor y convertirse en un odio tóxico y rancio que debemos poner de nuestra parte por evitar, ya sea previniéndolo o cortando la relación cuando sobrepase el límite que nosotros mismo delimitamos.