Cunado una mujer toma la decisión de separarse suele tratarse de una decisión sopesada.
Si bien es cierto que no se puede generalizar, suele existir una tendencia más meditativa y reflexiva de las mujeres que los hombres que por el contrario suelen ser más impulsivos.
Una mujer que quiere separarse suele ser una persona que ya lo ha pensado antes. En cambio el hombre que decide separarse suele ser más explosivo y tomar una decisión sin la meditación adecuada, lo que puede llevar al arrepentimiento.
Hay una edad clave que lleva a muchas mujeres a separarse. El hecho de separarse a los 40 lo que nadie te cuenta puede ser que es una edad en la que ya no se es tan joven, pero tampoco se es mayor, lo que puede ser una situación que haga a una persona no identificarse con un cambio de evolución personal concreto y llegar a sentir que no encaja o incomprensión.
muchas personas tienen la duda o incertidumbre de que si me separo no tengo donde ir pues aunque no sea lo más importante, también se debe de tener muy en cuenta para empezar de cero.
Con los adecuados abogados de separación podrá resolver sus dudas necesarias para materializar correctamente la ruptura. Las personas deberían de tener un mayor control sobre sus decisiones en relación a las consecuencias legales de cada decisión. Una mujer que se separa a los 30 no suele tener los mismos motivos que a los 40 ó 50. Tampoco por el mero hecho de tener la misma edad supondrá que exista coincidencia de los casos, pues dependerá de las circunstancias individuales y familiares, de las necesidades, de la personalidad… etc etc.
Muchas personas que se separan acaban reconciliándose. No es cuestión de sexo u orientación sexual, sino que es por sentir la necesidad de dar una segunda oportunidad a la relación. A pesar de ello, cuando una mujer ha llegado a la determinación de separarse, no podemos tratar de entenderla, pues los motivos importan, pero si la decisión está tomada puede ser un foco de conflictos que haga más difícil la ruptura y reduzca las posibilidades de gestión amistosa o incluso futura reconciliación.